Aquel día no quería ir.
A pesar de los años que han pasado no me creía capaz de verte y sin embargo ahí estabas.
Le temía a los recuerdos. Temía que al tenerte en frente todos esos momento volverían a mi. Me había imaginado muchos escenarios pero no esperaba volver a verte.
Tan alto como te recordaba. Tu abrazo distante, el tipo de abrazo entre dos personas que lo único que tienen en común son los amigos. Tu amabilidad ya sin el nerviosismo del que alguna vez fue el primer amor. Tan solo dos desconocidos que se reencuentran después de años. Intentando ponerse al día con la vida del otro pero sin saber nada realmente. Porque los ha separado, no sólo la distancia si no la vida misma. De todo a nada. Tan solo un recuerdo. Uno bueno.
Volver a verte sirvió de confirmación a algo que ya sabía, la vida sigue.
los textos de esta sección son míos. |
2 comentarios
¡Hola! Qué tristeza que las relaciones terminen de esa manera, más cuando había tanta confidencia y la vida los separa y ellos mismos no hacen por afianzar ese contacto </3
ResponderBorrar¡Un abrazo!
Gracias por leerme
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